lunes, 2 de junio de 2008

Simce 2007

Escribe Germán Becker, diputado

Los resultados del Simce demostraron, una vez más, que la calidad de nuestra educación no mejora.
Existen muchas explicaciones para justificar esta situación, desde las más ideologizadas que mediante añejas consignas solicitan cambios que técnicamente se ha demostrado que no tienen ninguna relación con el objetivo de calidad que se persigue, hasta otros que con argumentos de fondo, y basados en experiencias exitosas, proponen reformas que efectivamente apuntan a lograr una mejor educación para los niños de Chile.
La ministra de Educación, en mi opinión de manera acertada, al presentar los resultados de la prueba se refirió claramente a la directa relación existente entre el resultado de la evaluación del docente y el rendimiento de sus alumnos. De acuerdo a lo informado, los profesores que obtuvieron resultados de competentes o destacados en su evaluación obtienen mejores rendimientos de sus educandos.
Esto nos permite concluir algo que por lo demás es absolutamente obvio; el rol del docente es clave para mejorar la calidad de nuestra educación. Es por ello que este tema estará en el futuro en el centro de discusión. Debemos definir políticas que generen incentivos para ingresar a estudiar pedagogías, redefinir y adaptar curriculum de las universidades que las imparten (exigiendo su acreditación), fomentar políticas de incentivos reales que premien el buen desempeño de los docentes e implementar jubilaciones dignas de modo que les sea posible retirarse a una edad razonable.
Si bien los profesores y directivos docentes son pieza clave en el desafío de mejorar la calidad de la educación existen muchos otros actores que son imprescindibles. Especialmente importante es el involucramiento de los padres y apoderados en el proceso educativo, sostenedores comprometidos con el sistema y no sólo con el lucro y alumnos motivados en lograr mayores conocimientos. Los parlamentarios a través de la nueva LGE, a pesar de que algunos no estén de acuerdo, estamos haciendo un aporte sustantivo, que no será el único, para mejorar la calidad de la educación en nuestro país.

2 comentarios:

saqysay dijo...

Creo que cuando se habla de educación todos tenemos nuestras formulas para hacer frente a este problema, de todas esas formulas planteadas(sobre todo escuchando a los estudiantes) creo y debe salir algo real, para su mejoramiento.

A veces es bueno escuchar a los jóvenes, no por que no tengan derechos a manifestar su voto, como tal, pero a futuro estamos mejorando no tan sólo la educación de este país, sino también sus políticas de gobierno.

LGE es una nueva idea que experimenta el gobierno y pretender implementarla. Pero que mejor que los propios autores expongan las cosas que deben modificarse, al fin y al cabo son ellos los que se están educando, nosotros ya recibimos la nuestra, no fue buena, pero estamos en proceso de mejoras.

Saludos!

M. Berho dijo...

Por qué nuestras autoridades no dicen algo sobre el significado y alcance de la LGE. Personalmente desconozco qué se discute y hacia dónde se apunta con este instrumento. Si los estudiantes y hoy día los profesores se están manifestando claramente en contra de esta ley, será por algo, no? Creo que es necesario que este Diario nos informe a los ciudadnos al respecto. ¿Cómo esta ley podría mejorar o empeorar los resultados de la prueba SIMCE? ¿Resuelve o no el problema de la brecha educacional entre ricos y pobres? ¿Estimula o no una educación pública o deja el destino educativo de nuestros hijos en manos de los privados? ¿Favorece realmente el lucro? Son algunas preguntas que esperaría fuesen abordadas por nuestras autoridades, más allá de indicarnos permanentemente el lugar que ocupamos en los escalafones de desarrollo o de disputarse la razón frente a sus opositores con el fin de ganar votos.